Es un edificio de estilo neoclásico, con una original fachada sujeta por seis columnas y un amplio pórtico que comunica la plaza Mayor con el famoso paseo del Espolón. Los dos pisos superiores están coronados por una balaustrada y dos torres en los extremos rematadas en chapiteles de forja y debajo de cada una un reloj, curiosamente distintos entre sí. En medio de la balaustrada de piedra sobresale el escudo de la ciudad.
El Ayuntamiento de Burgos ha tenido varias sedes a lo largo de su historia, la actual de la Plaza Mayor, la del arco de Santa María, y alguna de las capillas de la Catedral, donde el concejo burgalés también celebró esporádicamente sus sesiones.